Mientras estaba en Tamarindo me hablaron de las olas de
Santa Teresa. Me dijeron que es un paraíso natural donde aun las empresas
respetan la Naturaleza. Necesitaba conocer el lugar en este viaje.
Como llegar
Para llegar desde San José se toma un bus que tarda 6 horas
en la Terminal de San Carlos y cuesta menos de 14 dólares incluyendo el billete
del ferry en el que el mismo bus monta. Si estás en Tamarindo tienes que tomar
bus a Liberia, de Liberia a Punta Arenas, Ferry de Punta Arenas a Paquera y en
Paquera un bus hasta Santa Teresa, como 10-12 horas y menos de 14 dólares. Por
suerte yo pude llegar a en coche, aunque lo mejor es alquilar un 4x4 ya que las
carreteras son difíciles y hay que dar la vuelta completa a la península
pasando por Paquera y Tambor.
En mi estancia en Tamarindo conocí a la gente que se quedaba
conmigo en el hostel Coral Reef Surf. Entre ellos, Adam de Australia y Sjoerd
de Holanda con quien me aventuré a ya que ellos querían viajar allí el mismo
día. Que buena decisión tomé! El día antes había ido a surfear con Adam a
Avellanas, allí conocí su espíritu deportista y vi su buen nivel surfeando. Con
Sjoerd tuve la oportunidad de surfear en Tamarindo justo antes de emprender el
viaje y trasmitía su pasión por el surf, su carácter europeo serio y su humor
negro desde el minuto uno. Me esperaban 4 días de risas, surf, naturaleza,
bromas, buena comida y buenas olas!
El ambiente
Una calle recorre todo el pueblo, donde se sitúan los
restaurantes, las tiendas de surf y los hostales de lado a lado. Muy tranquilo
al ser una época sin afluencia de turistas pero con olas! Casi todos los bares
y pastelerías estaban cerrados pero siempre se puede encontrar algún mercadito
abierto para comprar el desayuno y alguna soda (pequeño restaurante) donde
comer un casado, lo típico de Costa Rica: arroz, judías negras, plátano frito,
ensalada y pollo o carne. Me encanta viajar en temporada baja a los sitios
porque se puede apreciar mas la esencia de los lugares, conocer a los locales
con mas profundidad, sus costumbres, su estilo de vida… además al ser pocos
viajeros te da tiempo para poder saber más de tu compañero de habitación y las
relaciones se estrechan más fácilmente. Definitivamente Septiembre y Octubre
son los meses perfectos para viajar.
Me recomendaron para quedarme en Don Jons Lodge. Aquí,
encontramos justo lo que buscábamos, un lugar para descansar por las
noches,donde reunirnos después de las sesiones de surf, y compartir
experiencias con otros aventureros. Ellos tienen restaurante para los huéspedes
y varios tipos de habitación, desde dormitorios de 10 camas, apartamentos
privados, o bungalows con baño privado perdidos en la naturaleza. En uno de
esos bungalows nos alojamos nosotros, con 3 camas, nevera, ventilador, y baño
privado.
En este hostel tienen muy en cuenta el cuidado de la naturaleza, así como los detalles de la calidad con el que se trata a cada huésped. Como amante de los animales que me considero estaba en la gloria rodeada de perros, gatos, gallinas, iguanas y hasta monos! Los monos te despiertan por la mañana con su sonido tan peculiar llamándose entre ellos, es fácil encontrártelos a cualquier hora del día.
La playa
Super ancha y salvaje donde nunca vez edificios. De arena
blanca, agua caliente, limpia y fondo de arena donde se pueden disfrutar de
baños a cualquier hora del día. La vegetación cae sobre la orilla, palmeras y árboles
de todo tipo. No solo es frecuentada por surfistas, también van familias de
turistas o locales a pasear a sus perros.
Las olas
Santa Teresa es conocido por el alto nivel de las olas.
Entre swell y swell siempre hay olas y todo el día. Al estar expuesta al océano
totalmente entran swells de todas las direcciones. Fondo de arena que funciona
como una maquina da olas continuamente, las mareas cambian el tipo de ola. Y la
mejor hora para surfear es 2 horas antes y dos horas después de la marea alta.
Hay derechas e izquierdas pero cuando se pone grande mejor que los principiantes no entren.